domingo, 26 de noviembre de 2006

Aprendiendo Jigging - el equipo


Al principio utilizaba una caña de currican de gama baja y 20 libras, ponía en el carrete monofilamento del 50 ó 60 y empleaba un Shimano Titanos 8000. La verdad es que esto valer vale, por lo que si tienes algo parecido y estás pensando en empezar no te gastes dinero de momento, invierte en buenos Jigs. Quizá lo peor de este conjunto sea el tema del monofilamento.

Ahora tengo un equipo algo mejor, aunque no me he gastado tampoco mucho dinero. Tengo 2 cañas, una Lamiglas y una Shimano de las últimas que han sacado para Jigging, 2 carretes, un Ultegra 8000 y un Stradic 6000, ambos forrados con trenzado de 50 libras y 6 ó 7 brazas de monofilamento del 50 ó 60 al final. Con cualquiera de estos equipos te puedes defender con garantías en el Cantábrico, donde es extraordinario (al menos para mí) encontrarse con piezas de más de 6 Kg. Rara vez pesco por encima de los 120-130 metros con lo que la capacidad de estos modelos aunque justa es suficiente.

Algunos buenos complementos son el alicate especial para abrir las anillas de los Jigs, una pancera del tipo que las que se utilizan en StandUp, anillas de acero, giratorios y Assists que puedes comprar hechos o hacerte tú mismo. Entre las 2 cañas que tengo sin duda mucho mejor la Lamiglas y entre los carretes el Ultegra. Le tengo muchas ganas al Shimano Stella pero no creo que haya carrete que merezca ese precio.

Un detalle importante son los nudos, ya que la unión trenzado-monofilamento es un punto débil si no se ata bien, yo utilizo un nudo bimini twist en el trenzado y un bristol para amarrar el monofilamento en la gaza que deja el bimini, la unión es extremadamente fuerte y nunca he roto por este punto. Buscando en Google el nombre de estos nudos encontaréis páginas donde explican cómo realizarlos.

Con esto a bordo es más que suficiente.

sábado, 25 de noviembre de 2006

Aprendiendo Jigging - los señuelos


Este es el primero de una serie de 3 posts donde os contaré mis inicios en el Jigging por si alguna de mis experiencias os puede resultar de utilidad.

Todo empezó hace 3 años escuchando "rumores", que si Fulanito pesca unos abadejos tremendos al chivo, que si para pescar San Martiños hay que ir al petón con un chivo especial que se hace a mano para que brille y gire. Seguro que esto os suena familiar, pasa en todos los puertos, todo el mundo "ha oido", todo el mundo "cree" o todo el mundo "dice saber", pero al final se cuentan con los dedos de una mano los que de verdad saben o están dispuestos a compartir contigo sus experiencias, abierta y sinceramente. Bueno, como toda la información de la que disponía era esa, empecé a buscarme la vida con lo que tenía, así que al principio utilizaba los chivos normales de lanzar a la espuma con pelo de cabra para hacer Jigging, algo pescaba pero tenían muchos inconvenientes: poco peso (75-150gr), mala hidrodinámica y enganchaban mucho.
Preguntando y preguntando encontré a uno de esos pescadores con los que sí puedes hablar, y me dejó este chivo de la foto (gracias Rafa), hecho a mano pero ya pensado para este tipo de pesca, mejor hidrodinámica y más peso, pero difícil de conseguir, sólo tenía uno así que el día que lo perdí me quedé sin nada con lo que hacer Jigging.

Fue entonces cuando vi un vídeo en Seasons donde salía Nicola Zingarelli pescando con Jigs (mucho peores que las maravillas que ahora tiene en su web) así que me decidí a investigar, encontré su web www.caranx.net, hablamos y le pedí consejo, días más tarde recibí en casa una caja de preciosos peces de colores, con formas muy bien pensadas, brillos, unos assist maravillosos, pero que a mí de entrada me parecieron enormes y pensé, no me puedo creer que haya en mis mares un pez capaz de tragarse este pedazo de plomo con un anzuelo tan grande.

Ese mismo fin de semana salí a pescar y desde luego tenía mucha más fe en mi profundizador que en los enormes misiles de plomo, así que solamente después de varias pasada por encima de mis piedras preferidas, ninguna picada y ver que la sonda sí tenía actividad, decidí poner uno de los Jigs. Lo recuerdo bien, era un Knife verdoso de 180 gr con el anzuelo gigante del Assist amarrado a la cabeza. La verdad es que miraba la caña con aquello colgado y solamente me entraban ganas de reir, bueno, por lo menos aquí a 7 millas de tierra no me ve nadie ;-)

Ahí va el Jig para abajo, zizzageando a un lado y al otro, cuando llega al fondo y empiezo a recoger picada, tira mucho, incluso corre el freno del carrete, pero se suelta. Vuelvo abajo y otra vez, pero esta vez sube hasta arriba, un abadejo de 1,5 Kg, muy bien. En lo que quedaba de mañana ese día pesqué otros 4 abadejos todos estupendos, con el mayor cercano a los 5 kg y unas carreras en el carrete impresionantes. Ahora tenía fe ciega en esos enormes misiles. He tenido suerte con esto del jigging, tras este estreno exitoso vinieron jornadas malas, pero ese primer día me dio fuerzas para mantener la constancia y seguir aprendiendo.

Os pongo algunas fotos con los Jigs que yo utilizo, mis favoritos son el SeaRock, el Hooker y el Knife, siempre amarrando el Assist por arriba para evitar enrocar. No me gusta poner metralletas, esa es la mejor manera de no parar de sacar verdeles y abadejos pequeños o de romper cuando te pica una pieza buena. En su lugar normalmente utilizo una escabela o un vinilo, de esta manera puedes pescar selectivo sin renunciar al pescado de entre medio kg y 1 kg que es en realidad el más abundante en estas aguas evitando jornadas de capote. Creo que esta combinación, quizá sin sentido alguno en otras aguas con más abundancia de peces grandes, es interesante para el Cantábrico. En las fotos están también mis escabelas y vinilos preferidos.

jueves, 16 de noviembre de 2006

Profundizador Penn Phatom Master.


Para aquellos que estéis pensando en comprar un profundizador quizá este post os ayude. Yo tengo el Penn que podéis ver en la foto desde hace 3 años, nunca he tenido el más mínimo problema con él, es un equipo muy simple, sólido y fiable. Es importante que os fijéis en varias cosas: el cuentametros, el sistema de fijación a la regala y dónde colocar la caña.
De entrada el equipo viene con un contador de profundidad en pies, yo lo he cambiado por uno en metros que venden como accesorio, también podéis cambiar la unidad de la sonda y manejaros en pies si queréis ahorraros el accesorio. El sistema de fijación es importante, en mi caso tengo barandilla y por tanto la solución consistió en pedir un adaptador para fijar la base en una pieza que encaja en el cañero. El tercero es dónde poner la caña de curricán, hay un accesorio que permite que la caña se coloque en una base que se atornilla al cuerpo del profundizador, yo la tengo, pero en lugar de usar esto pongo la caña en un cañero de la banda y el profundizador saliendo por popa.

Normalmente lo uso en fondos de 20 a 50 metros, en profundidades mayores se hace muy incómodo subir la bola de 5 Kg cuando se suelta la pinza accidentalmente y se pierde mucho tiempo en calar. El curri de fondo es una técnica que utilizo cuando los hot spots no funcionan y muchas veces gracias a esta técnica he descubierto piedras muy buenas, incluso sin actividad aparente en la sonda.

Un pequeño truco que utilizo para pescar bien abajo y más cómodo es tarar el desfase sobre fondo de arena hasta que construyo una tabla. Me voy a zonas de fondo de arena de diferentes profundidades y a la velocidad de cacea dejo caer la bola de plomo sin aparejo hasta que toca, entonces apunto los metros de más sobre la profundidad que he tenido que largar de cable de acero, a esto le llamo desfase a esta profundidad. Luego, cuando pesco, pongo la bola en superficie, miro el fondo que da la sonda y pongo el cuentametros en -X m, donde X es el desfase que he medido a esta profundidad de trabajo, así empiezo a largar hasta que el cuentamentros marca uno o dos metros menos que la sonda.

Para esta pesca a mí me resulta mucho más adecuado un carrete de curricán que cualquier otro, largo con la bobina en free y la chicharra conectada, pero es importante que la bola baje suavemente, de otro modo es posible cargarse la chicharra del carrete. Otro detalle que también podéis poder ver en la foto es que tanto profundizador como caña van "atados" al barco por un cabo terminado en mosquetón, el freno del profundizador lo llevo al mínimo por si toco para evitar perder el equipo. Espero que os ayude, para más información no dudéis en preguntar.

miércoles, 15 de noviembre de 2006

El Radar ¿aliado o enemigo?


Aunque suene un poco raro el titular, lo único que trato de expresar es que vale más no tener radar que tenerlo y no saber usarlo, ya que podríamos confiarnos en que no tenemos nada por la proa por un uso inadecuado del equipo y tener un accidente.

El radar no es un aparato tan sencillo de usar como una sonda y de él depende en gran medida nuestra seguridad cuando navegamos de noche o con niebla.

Algunos de los errores básicos que normalmente cometemos cuando empezamos a usar un radar en nuestra embarcación son:

  • lo encendemos el primer día para ver que funciona y no volvemos a usarlo hasta una salida con noche o niebla
  • cambiamos el rango (alcance) sin reajuste de la ganancia
  • subimos el atenuador SeaClutter para evitar el ruido alrededor del barco y dejar la pantalla más limpia
En lugar de esto deberíamos de:

  • usar el radar varios días en condiciones de buena visibilidad para acostumbrarnos a identificar cómo se ve en el radar nuestra costa, tanto saliendo como entrando, comprobar que mide bien las distancias a los barcos, que cuando enfocamos un blanco sale perfectamente alineado en el radar, la imagen que producen en la pantalla los diferentes tipos de embarcaciones (pequeñas de madera, pequeñas de fibra, grandes de hierro, etc)
  • probar distintos rangos y, especialmente cuando lo ampliamos, subir la ganancia hasta que empiezan a aparecer puntitos negros en las zonas más alejadas del punto central
  • mantener siempre los atenuadores de Sea y Rain al mínimo y comprobar, con barcos dentro del alcance, el efecto que producen para ver cómo llegan a enmascarar a las pequeñas embarcaciones más próximas a nosotros
Bueno, cada radar funciona de una manera diferente pero creo que estas indicaciones le pueden ser de utilidad a cualquier nuevo usuario de esta maravilla de equipo.

Un buen matrero (bonito).


Solamente había salido una vez a pescar bonitos, fue el año pasado en 2005 pero no tuvimos ni picada y volvimos de vacío. Mi embarcación no vale para este tipo de pesca de altura en este Cantábrico que si se enfada te puede dar un susto.

Este verano un compañero de pesca (Ramón), que estrenaba este verano una preciosa Rodman 1250, me invitó a una de sus salidas. Fue un día de pesca extraordinario, con buena compañía y excelente pesca, ya que superamos las 30 piezas de bonito y albacora, entre las que se encontraba un estupendo matrero de más de 20 Kg.

Esta pesca de altura tras el bonito en el Cantábrico me ha parecido de otra división, al menos comparada con la pesca costera que yo realizo, típicamente a menos de 12 millas de la costa. Largos desplazamientos, muchas horas de mar, muchas líneas en el agua, sedales más gruesos, más barco, más motores, más, más, ...



Ver a los bonitos saltando fuera del agua cuando comen los bancos de paparda es una maravilla y cuando pican de manera simultánea hay tareas para todos con lo que el trabajo de equipo es muy importante.

En esta entrada no puedo contaros nada de técnicas ya que soy un completo novato y mi experiencia se limita a esta única salida, simplemente comentaros que toda la jornada transcurrió al curricán con una marcha de 6 a 7 nudos, no empleamos cañas sino que las líneas se trabajan a mano y como cebo se utilizan los típicos pulpitos artesanos de vinilo con rafia.

Solamente un consejo, antes de aventuraros 30 ó 40 millas mar adentro aseguráos de que tenéis respuesta para todas las adversidades que se pueden presentar: radar para la niebla, balsa salvavidas de capacidad suficiente y en buen estado, combutible suficiente, radiobaliza, etc

martes, 14 de noviembre de 2006

Pesca desde embarcacion: jigging, spinning y fondo.



Bienvenido a este Blog sobre la pesca desde embarcación.

Aquí encontrarás las salidas de pesca que realizo durante el año, con el objetivo de compartir experiencias y aprender cosas nuevas.

Mi puerto base está en Viveiro (Lugo), donde tengo una embarcación a la que llamo "La Santina", es una Rodman 620 bien equipada para la pesca costera. Mis técnicas preferidas son el Jigging, fundamentalmente en otoño e invierno buscando abadejos y San Martiños, el spinning, tras la lubina con señuelos artificiales de superficie, y la pesca a fondo en profundidades medio-altas, fundamentalmente sobre pecios o en petones profundos. Te animo a comentar las entradas y espero que encuentres contenidos que te resulten interesantes.

lunes, 13 de noviembre de 2006

Hablando de la pesca de la lubina.


Este fin de semana hay que quedarse en tierra, toca mantenimiento de la embarcación y ya se sabe.

Buen día para pasar por la tienda de mi amigo Fran (gran pescador de lubinas, el mejor que conozco) y hacerse con algunos señuelos para probar este invierno por las espumas.

No es el invierno la estación que más me gusta para la lubina, aunque mis mejores piezas han sido siempre en esta época, lanzando peces flotantes entre las espumas pegadas a la piedra, tan pendiente del timón como de la caña.

Me gusta pescar la lubina con artificiales a spinning, llevo bastantes años haciéndolo, especialmente desde que Fran me descubrió los poppers y paseantes hace 3 ó 4 años, desde ese día la enfermedad por esta pesca entró en una fase bastante avanzada, y es que ver a un robalo de más de 3 Kg lanzarse como un animal tras un popper pone los nervios a flor de piel a cualquiera.

En verano, normalmente a partir de Junio, empiezan a acercarse bastante a las playas y andan tras el pescado pequeño que también se acerca a la costa, a spinning con poppers he pasado algunos de los días más bonitos de pesca que recuerdo.

Es en estas fechas de verano una pesca en la que deberíamos ser especialmente responsables con las capturas, he tenido días de más de 50 piezas y es muy importante soltar el pescado que no da la talla e incluso llegado el momento empezar a soltarlo todo si ya tenemos suficiente.

Actualmente utilizo para esta pesca una caña shimano BeastMaster de 2,40 metros y un carrete Shimano Stradic 6000 en el que pongo un trenzado bien fino al que empalmo una braza de monofilamento de buena calidad, normalmente lo termino con una grapa para cambiar fácilmente de señuelo.

Después de haber pasado por todo tipo de teorías sobre el viento, las lunas, el tipo de mar, etc creo que ahora es cuando menos claro lo tengo, las he pescado lloviendo, al amanecer, al anochecer, de noche, en pleno día a pleno sol, con marea bajando y subiendo, con viento sur y NE, en fin, casi en cualquier circunstancia es posible encontrar algún sitio con alguna lubina dispuesta a picar, aunque hay días que desgraciadamente no lo encuentras y te llevas un buen capote.

El comentario más acertado, en mi opinión, sobre esta pesca lo leí en un libro donde el autor hablaba de buscar para pescar lubinas “la noche”, “la noche” entendida en sentido amplio como aquel lugar en el que las condiciones de visibilidad para el pez sean adversas, bien por la luz, bien por la espuma o bien por el viento si pescamos arriba.

Hoy comentaba con Fran cómo había ido el verano en cuanto a lubinas, el mejor de los últimos años para él ya que había hecho pescas muy buenas con piezas de muy buen tamaño, consiguiendo incluso batir su propio récord con una pieza de casi 8 Kg.

En mi caso no tan bueno, sí he tenido días donde he pescado bastantes lubinas, pero la más grande no llegaba a los 2,5 Kg, me he salido bastante de mis pesqueros habituales buscando nuevas zonas y no he dado todavía con zonas extraordinarias del nivel de otras que ya tengo.

En cualquier caso, la satisfacción de localizar nuevos sitios o situaciones en las que hacer buenas pescatas es una maravilla, aunque para ello haya que hacer algunos capotes, para dedicarse a seguirte con los prismáticos o acercarse a marcarte con el GPS ya hay otro tipo de pescadores.

Si no habéis probado nunca la pesca de la lubina con artificiales de superficie no dudéis en hacerlo, un día de picadas espectaculares podéis llegar a perjudicar un poco a vuestro corazón, pero dejaréis recuerdos en la memoria que durarán incluso hasta cuando ya no estemos aquí para seguir pescando.

(c) 4/11/2006

Mi primer pargo a jigging.



El sábado salí a pescar a las 7:45, todavía era de noche y además había algo de niebla, con lo que durante todo el camino hasta el pesquero tuve que llevar el radar encendido e ir muy atento a la proa.

Era la primera salida de otoño en la que me había planteado ir a buscar buenos abadejos, que en estas fechas deberían estar ya más próximos a tierra. Los datos que yo tengo parecen indicar que las piezas de abadejo por encima de los 4 Kg están cerca de la costa tras el desove, desde octubre hasta marzo, pero quizá alguien tenga información más precisa pues he escuchado también otras teorías.

El punto de pesca estaba a unas 10 millas del puerto base, en una zona con una profundidad de 50-60 metros, un cubierto que se eleva desde unas zonas de arena con fondo de 75-80 metros. Al llegar no detecté en la sonda nada de actividad, lo que yo considero bastante importante pues las grandes piezas normalmente las pesco cuando se ve “engado” en la sonda, la verdad es que la cosa no prometía mucho pero decidí probar igualmente sobre coordenadas que en alguna ocasión dieron capturas, llevaba ya una hora de Jigging y lo único que había pescado era un chicharro más bien pequeño y una cabra grande que subió robada por el Jig, abadejos ni rastro y la sonda seguía igual de parada que al principio.

Sabía que esta iba a ser una mañana muy corta de pesca porque a las 14:00 tenía una comida familiar y debía regresar temprano así que para aprovechar el tiempo y tocar alguna otra piedra me moví hacia la costa buscando unas sierras que están en 30 metros y en las que en alguna ocasión había pescado algunas lubinas de buen tamaño. Al llegar la sonda no indicaba nada y la cosa tenía mala pinta, pero después de una media hora note una buena picada y terminé subiendo a bordo un precioso pargo que pesó algo más de 1 Kg, no suelo pescar este pescado por mi zona así que me hizo una ilusión especial, picó en la escabela noruega (le llamo así porque me las ha traído un amigo de allí, son las que usan en aquella zona para el abadejo) que pongo por encima del Jig.

Después de un rato probando en la misma zona vi que eran ya las 11 y era conveniente ir poniendo rumbo a tierra, pero lo hice costeando abriendo un poco en busca de más calado, navegando a unos 7 nudos y fijándome bien en la sonda. De repente apareció pescado un poco elevado del fondo y alguna marca de pescado grande alrededor, es una imagen familiar y no suele fallar, así que coloqué el barco buscando una buena deriva y en la primera pasada picó un abadejo pequeño de 1/2 kg, poco después picó un precioso abadejo que dio 4,6 Kg, esta vez fue el Hooker rosa que podéis ver en las fotos quien consiguó la captura.



Continué pescando un poco más la mancha de pescado, apurando los últimos minutos antes de volver a tierra para llegar a tiempo a la comida, y aún tuve la suerte de disfrutar de otras dos piezas más, también abadejos que estaban entre 1 y 1,5 Kg.

En fin, un buen comienzo de la campaña de otoño, es una época que me encanta para la pesca a Jigging buscando abadejos, san martiños y lubinas, es raro sacar un pargo pero en esta ocasión ha habido suerte ;-)

(c) 29/10/2006