domingo, 21 de septiembre de 2008

Lucanus System


Aunque principalmente se trata de un ejercicio de marketing, habrá que estar atentos a esta nueva propuesta de Shimano. Aprovechando la moda de los Rubber Jigs Shimano presenta un sistema completo para pescar con este tipo de señuelos, el Lucanus Jig System.

Al concebirlo como un sistema completo aprovecha para poner en el mercado cañas y carretes específicos para este tipo de pesca. En concreto, y junto a los Jig Lucanus, Shimano nos trae una nueva versión del carrete Calcutta, el 4000 LJV, con un poco más de grip en la manivela, mejores rodamientos y poco más me parece. En cuanto a cañas, dentro del sistema Lucanus se presentan las Tescata tanto en formato para carrete Spinning como Casting y en diferentes acciones. La verdad es que estos nuevo señuelos creo que van a funcionar bien, aunque de momento mi experiencia con ellos no ha sido especialmente productiva. En esta página que os incluyo a continuación Shimano describe en detalle el sistema e incluso hay un vídeo interesante comentando el origen de esta modalidad de pesca, particularidades de estas cañas y carretes, modo de trabajar el JIg, etc. Merece la pena echar un vistazo.

www.lucanusjig.com

Yo me atrevo a recomendar mi versión del sistema Lucanus en cuanto a caña y carrete para nuestros mares. Yo estoy empleando la misma Shimano Antares Braid Boat con la que pesco los vinilos en profundidad. En cuanto al carrete me quedo con el TLD 20, lo ideal sería el TLD15 ya que es más ligero y tiene potencia y capacidad de hilo más que suficientes pero no quiero ni pensar la cantidad de carretes que tengo ya ;-). En precio este equipo creo que no llega a la mitad del nuevo sistema Lucanus y creo que no le desmerece en nada.

domingo, 14 de septiembre de 2008

De colores y tiburones


Pues este fin de semana salí al mar. Otra soberana paliza de Jigging, hasta me duelen los brazos al aporrear el teclado. El parte no era muy bueno para estar muy lejos de la costa, pero había ganas y la verdad es que al final el viento estuvo bastante contenido, marejada pero casi toda de la trapallada que dejaba el mar de fondo. Como de costumbre en las salidas largas casi 12 horas de jornada. La cosa no empezó nada bien, y no es que terminara mucho mejor pero al menos emoción no ha faltado, que ya es algo. En las primeras piedras en 30-50 metros buenas sondas pero nada de pescado interesante. Buscando más agua la cosa no mejoraba. Casi hasta el mediodía no apareció la primera piedra con algo de actividad y en poco tiempo 4 piezas de abadejo de talla mediana y algunos chicharros subieron a bordo. Un buen apunte de estas capturas, el lumo y los colores más adecuados para fondo rompieron la teoría (si es que en esto de la pesca podemos hablar de teoría) y el Jig sin lumo ni colores de fondo se llevaba la mayor parte de las picadas, las capturas y el tamaño en las piezas. Viendo que la piedra aparentemente no tenía trofeos buscamos una nueva prueba. No sé si iban ya 19 ó 25 piedras y aunque cansado ya por el esfuerzo mantengo la fe en que aún hay tiempo y terreno para hacer algo interesante. Hay que currarse mucho el pescado, cada vez son menos los días que triunfas en la primera piedra. Llegados al nuevo sitio la cosa no pinta mal. Al igual que casi todas las piedras anteriores encuentro buena sonda, la piedra además tiene agua, por encima de los 80 metros casi toda. La primera deriva sale un abadejo mediano pero mejor que los anteriores. En la segunda el compañero que hoy viene a bordo consigue batir su marca en abadejos y por fin se pone por encima de los 5 Kg. Un bonito ejemplar que me hace la misma ilusión que haberlo pescado. En la tercera empieza el caos. Tengo una aferrada fuerte y corre carrete con soltura, me pilla con el 8000 y un bajo en 30 libras pero debería aguantar, pega otra arrancada con fuerza y la línea queda en banda, mierda, otra vez que pierdo con una aferrada (y es que ya llevo varias). Al levantar la línea el monofilamento viene claramente cortado. Yo creo que son caellas, una especie de tiburón que tenemos por la zona. Al cañero la caña con el 8000 y a la mano el 20000 con bajo en 50 libras, le meto al Jig un triple en la anilla de cola a ver si hay suerte y consigo que no toque hilo. Siguiente deriva y picada. Corre con soltura el Stella con el freno ajustado para romper en unas 15 libras, suelta, mierda otra vez. Esta vez no se ha llevado el Jig o sea que no ha cortado. Al llegar arriba uno de los anzuelos del triple viene abierto. Tienen que ser caellas, no creo a un abadejo capaz de hacer estas cosas. No es que tenga ganas de subir un tiburón, para casa no lo llevo y liberarlo con vida podría ser peligroso pero estos pececitos me van a matar a sustos. Bonita jornada y bonita experiencia con los ataques de estos bichos que se comen mis jigs como si fueran gominolas, y una nueva cura de humildad sobre Jigs y colores. Me encanta esta pesca, la emoción por el animal y tener que reinventarse cada día, ya estoy deseando volver.